Español | English

Rituales de Navidad y Año Nuevo

Rituales de Navidad y Año Nuevo
Llega fin de año y las energías comienzan a renovarse, dando lugar a los buenos deseos.

El ser humano siempre necesitó del ritual para emprender cualquier tipo de cambio. El ritual actúa consciente y subconscientemente. Allí radica su poder.

Aquí te presentamos diferentes tipos de rituales para que utilices este fin de año. Los mismos se deben realizar en la transición del 24 a 25 de Diciembre, o bien del 31 de Diciembre al 1 de Enero.

¡Elige el tuyo!


Ritual del Cheque de la Abundancia

Seguro lo conocerás. Es un cheque en blanco que puedes imprimir y llenar con tus propios datos y la cifra que deseas recibir.

La fuerza de este ritual no radica sólo en completar el cheque, sino en mirarlo y visualizarse ya con el  dinero deseado.

Luego de realizar el ritual, deberás pegarlo en algún lugar donde lo veas a diario. Puede ser en el techo sobre tu cama, o en la pared frente a tu computadora. Tú eliges dónde.

Aquí podrás descargar el cheque de la abundancia.


Ritual del Fuego y las Cenizas

Enciende una vela. Siéntate frente a ella, completamente a solas, y en una hoja de papel escríbele una carta al Universo. Allí pídele todos tus deseos.

No sientas vergüenza, el Universo está esperando que le pidas. Tan solo pide.

Recuerdo siempre escribir en positivo. No hables de lo que no quieres, sino de lo que quieres.

Cierra tu nota agradeciéndole al Universo por escucharte y por cumplir tus deseos.

Ahora, enciende la hoja con el fuego de la vela. Deja que la misma se consuma toda mientras te visualizas con tus deseos ya cumplidos. ¡Ten cuidado de no quemarte!

Finalmente, recoge las cenizas y arrójalas al viento. Piensa como las mismas recorrerán el mundo en busca de concederte tus deseos. Ten fe que así será.

Cada vez que puedas, observa la vela mientras recuerdas tus deseos. Sonríele. Deja que se consuma toda.

Si quieres, puedes repetir este ritual cada un mes, sumando nuevos deseos a medida que estos se cumplan.


Ritual de la Trenza

Necesitarás de tres cintas de tela de un color diferente cada una: azul para la salud, verde para el dinero y rojo para el amor.

Los colores son simplemente simbólicos. De creerlo necesario, utiliza otros. Lo importante es que tú relaciones cada color con una de estas tres áreas.

Comienza a realizar una trenza. A medida que pasas las cintas, vas agradeciendo (mental o verbalmente) el área que representa.

Cuando pasas la azul dices "Gracias Universo por toda la Salud en mi vida". Luego pasas la verde y dice "Gracias Universo por todo el Dinero en mi vida". Por última la roja y dices "Gracias Universo por todo el Amor en mi vida".

Sigue así hasta completar la trenza. Una vez finalizado, cierra los ojos y repite "Gracias, gracias, gracias". Siente la mayor gratitud posible de estas palabras.

Permanece con la trenza toda la noche. Átala a tu cuerpo de ser necesario.

Al día siguiente, cuélgala en un lugar donde la veas a menudo. Puede ser en la puerta de entrada de tu casa, o bien en el respaldo de tu cama. Elige ese lugar ideal para recordar tu gratitud por los aspectos más importantes de tu vida.


Ritual de las 12 Uvas

Recoge un racimo de uvas. Asegúrate que tenga por lo menos doce.

Cierra tus ojos. Agarra una uva y tenla en alto.

Piensa en un deseo. Visualízate cumpliendo ese deseo.

Ahora, imagina como las vibraciones de tu pensamiento modifican el jugo de la uva que tienes en tu mano.

Cómete la uva y disfrútala. Saborea tu deseo siendo ya parte tuyo.

Repite lo mismo con las 11 uvas restantes. Si quieres puedes insistir con el mismo deseo, pero la idea es que utilices en total 12 deseos diferentes, uno por cada mes del año.

Si no te gusta la uva, puedes utilizar alguna otra fruta pequeña que te guste, como la cereza o la frutilla. Lo importante es que tenga un sabor agradable y dulce.


Ritual de la Bebida

Este ritual es muy parecido al de las uvas, solo que se utiliza para un único deseo.

Sírvete una copa de sidra, champagne o vino. No importa cuál, elige la bebida que le sea más grata a tu paladar.

Sostén la copa con ambas manos. Cierra tus ojos y piensa en un deseo. Visualízate con ese deseo ya cumplido.

Luego, imagina como tu pensamiento ingresa a través de la vibración al líquido de la copa y modifica sus partículas. Estás configurando la materia de la bebida con tus buenos deseos.

Finalmente, tómate toda la copa de un solo trago, pero hazlo lentamente. Lo importante es que disfrutes del sabor de la bebida mientras reconoces que tus deseos ya están formando parte de ti.

Si no bebes alcohol, la opción alternativa es usar un vaso con agua.


Cuéntanos cuál de ellos vas a poner en práctica en tus próximas fiestas, y compártelo con amigos!


No hay comentarios:

Viéndose Ahora

Los Más Vistos